Hoy vì a un hombre sin si mano derecha, y me he aterrado, no tanto por el hombre pues lo he imaginado en mi persona, pero con su izquierda escribìa el màs bello puema que yo haya leido, al mismo tiempo un invidente, tocabà en el piano una melodìa hermosa que bien combinaria que lo leido, y yo que he intentado tocar un instrumento, no se si no ¿he podido o me he limitado.? en ocasiones creo es lo segundo, un niño en silla de ruedas, sus piernas habia perdido y de nuevo en mi lo imagine, me entristecì y el ce acerco, y cuestiono ¿por que lloras amigo? no supe que decir, pero me regalo la sonrisa màs agradable que alguien me haya dado, asì convivi con muchos, y me custione, Como era posible que apesar de todo cada uno me regalo algo, el bello poema la màgica musica, la sonrisa de un niño, y por si fuera poco una tela bordada con los pies de una sonriente anciana, me di cuienta entonces que quizà yo soy el discapacitado realmente, y creo que muchas personas lo somos solo por juzgar.